La Leyenda del Jucumari

La Leyenda del Jucumari

Cuenta la leyenda que las personas  creen que el jukumari es mitad hombre y mitad oso, y que para preservar su descendencia debe secuestrar a una mujer. El “jucu”, tras robar a una mujer y cargarla en su hombro, se interna en las montañas y la encierra en su cueva. Al pasar los años, nace su retoño. Y aunque éste también es mitad hombre y mitad oso, su madre le enseña todo como a un humano. El pequeño promete a su madre que al crecer retirará la enorme piedra y huirán. Y eso ocurre en ausencia del oso. Cuando éste vuelve a su cueva, en lo alto de la montaña, descubre el hecho y se enoja muchísimo. Sale bramando y se hace un ovillo para bajar más rápido en una desesperada persecución por recuperar a su hijo y a su mujer.

Madre e hijo llegan al pueblo y viven tranquilos un tiempo. El joven es un hombre cubierto de pelos y sus amigos se burlan de él. Un día, el muchacho pelea con uno de ellos, le da un golpe que lo deja inconsciente en el piso. La gente del pueblo se alborota y la madre le dice al hijo que huya a las montañas y que busque a su padre para vivir con él...